Kimberley Motley, abogada estadounidense fue detenida el 16.12.2016 por autoridades cubanas, al violar las leyes del país cuando participaba premeditadamente en una provocación organizada desde Estados Unidos contra la Revolución cubana.
Graduada de Derecho en 2003, ingresó en 2008 a un programa del Departamento de Estado para acciones en Afganistán, no para condenar los bombardeos y crímenes yanquis contra civiles indefensos, sino para “defender” a las mujeres de ese país.
La señora Motley, arribó a la Habana con visado de turismo con el fin de participar en el Festival de Jazz de La Habana, lo que había anunciado con un post de Facebook; por tanto, pudo realizar su viaje a la Isla respaldada por una licencia cultural, ya que los ciudadanos de Estados Unidos tienen limitados sus derechos civiles, impidiéndosele hacer turismo en Cuba desde hace casi 60 años, violaciones que la abogada no cuestiona, ni ejecuta acciones legales en defensa de sus conciudadanos.
El plan de provocación se diseñó aprovechando la celebración de dos importantes eventos internacionales en La Habana, el 38 Festival Latinoamericano de Cine y el Festival de Jazz, los que atraen a numerosos periodistas y personalidades de la cultura.
Sin saber historia de Cuba, de la creación de la contrarrevolución por la CIA desde 1960 según documentos desclasificados, y su sostenimiento financiero con no menos de 20 millones de dólares anuales aprobados por Barack Obama, la abogada llegó a La Habana mandada a participar en un show mediático frente al Tribunal Provincial, en compañía de elementos sufragados por el Gobierno norteamericano carentes de prestigio social y con pésimos antecedentes delictivos comunes.
Ella sabía que su actuación violaba las leyes cubanas porque su visado de entrada no le permite participar en ese tipo de actos, unido a la alteración del orden público.
La prueba de que fue un plan provocativo organizado desde Miami, fueron las declaraciones inmediatas de Rosa María Paya Sardiñas, apadrinada por el senador Marco Rubio y de la representante Ileana Ros-Lehtinen, integrantes de la mafia terrorista anticubana, de que Kimberley Motley, “también tenía intenciones de asumir la defensa de Eduardo Cardet, coordinador nacional del Movimiento Cristiano de Liberación (MCL), detenido días antes por agredir a agentes del orden en plena vía pública.
Otro elemento probatorio de la acción subversiva fue la rápida publicación de la noticia en la prensa de Estados Unidos, respaldada por Thor Halvorssen, director ejecutivo de Human Rights Foundation, quien escribió en Twitter: “Mostley es una abogada aclamada internacionalmente y fue arrestada en Cuba cuando se disponía a ofrecer una conferencia de prensa sobre el artista encarcelado “El Sexto”.
Danilo Maldonado, apodado “El Sexto”, fue fabricado desde Miami como “artista”, ha estado vinculado al arte, no ha cursado estudios ni tiene obra alguna que mostrar. Sus “grafitis” solo recogen la palabra “El Sexto”, y si a eso se le puede denominar obra de arte, en cualquier ciudad estadounidense se muere de hambre en tres días.
Maldonado, adicto a las drogas, al igual que el supuesto músico Gorki Ávila, son mantenidos financieramente desde Estados Unidos para realizar acciones provocativas callejeras, divulgadas con inmediatez por las redes sociales, para crear la imagen de que en Cuba existe un movimiento popular contrario al sistema, algo diseñado en 1962 por la CIA contra la Revolución, plasmado así en sus programas desclasificados.
La abogada Mostley fue trasladada a la unidad de la policía y liberada en pocos minutos, desde donde informó a los organizadores de la acción: “me están tratando bien”
El propio Thor Halvorssen aseguró: “cuando la contactamos para que cumpliera el encargo le explicamos que la podían detener, que en Cuba era normal que la encarcelaran con un cargo y mantenerla un largo rato y después soltarla, lo cual aceptó consciente del riesgo”.
Posteriormente Mosley regresó a Estados Unidos sin dificultades.
Antes de graduarse como abogada ganó en 2004 el concurso de belleza “Miss. Wisconsin”, por tanto, está acostumbrada y siente placer por la publicidad.
Lo significativo de la aceptación de ese encargo es que siempre fue advertida de que en Cuba la policía no golpea, ni utiliza gases lacrimógenos y su vida no corría peligro alguno, algo muy distinto a lo que sucede en su país donde por ser de raza negra y violadora de las leyes, seguramente la pasaría bien mal de prestarse a ese juego, aunque posteriormente recibiera como pago una buena suma de dinero.
¿Por qué Human Rights Foundation no la contrató para defender al preso boricua Oscar López, quien lleva 35 años en cárceles norteamericanas por tener ideas independentistas y sometido a crueles torturas sicológicas?
¿No merecen una buena defensa de Human Rights Foundation los trabajadores peruanos de la Federación de Sindicatos del Poder Judicial, que por exigir una mejora salarial fueron salvajemente reprimidos por la policía esta misma semana, y además de golpes los rociaron con gas lacrimógeno y varios de ellos detenidos violentamente?
¿O los 200 trabajadores de la empresa Ingenio Ledesma, en Jujuy Argentina, despiadadamente reprimidos el 15.12.2016, recibiendo impactos de balas de goma disparados a quemarropa por la policía y la seguridad privada de la compañía, tras una jornada de protestas pacíficas en reclamo de mejores salarios y condiciones de trabajo?
Esta nueva provocación, donde inusualmente participó una ciudadana estadounidense, presume la intensión de darle argumentos al nuevo Presidente y exigirle romper relaciones diplomáticas con Cuba, algo bien deseado por la mafia anticubana; pero los cubanos tienen suficiente experiencia e inteligencia para no tomar medidas apasionadas.
Veremos que cuentas le exigirá la OFAC a Kimberley Motley, por haber mentido en la solicitud de licencia cultural para viajar a Cuba.
Mientras tanto, la mafia volvió a recibir otra derrota a sus pretensiones, porque aquellos que violen las leyes cubanas recibirán la sanción adecuada, como mismo se hace en cualquier país de este convulso mundo, y como aseguró José Martí:
“No se ha de permitir el embellecimiento del delito, porque es como convidar a cometerlo”.
La abogada estadounidense Kimberley Motley, detenida en La Habana cuando pretendía ofrecer una conferencia de prensa sobre la aparente situación de dos contrarrevolucionarios –Danilo Maldonado “El Sexto” y Eduardo Cardet– realizó un show mediático que, a todas luces, fue organizado previamente como un acto de provocación contra el gobierno cubano y la legislación vigente en el país. Pretendiendo ser, indistintamente abogada defensora pro bono de Maldonado o asesora de su defensa según diversas fuentes, violó directamente las leyes cubanas al no tener permiso oficial para ejercer tal desempeño. Aún, según declaraciones realizadas ayer, intenta permanecer en su dudoso intento de presionar y provocar a las autoridades cubanas en apoyo a elementos contrarrevolucionarios internos, lo cual constituye una flagrante violación de nuestra soberanía.
La presencia de prensa internacional en el acto frente al Tribunal Provincial de La Habana, previa coordinación y convocatoria de manera sigilosa, es otro elemento que pone en duda la intencionalidad de los organizadores, entre ellos la señora Motley. Un propio representante de HRF le había advertido de los riesgos de su presencia en Cuba para realizar estas indagatorias y declaraciones fuera del marco de la legislación cubana. No obstante, ella accedió a cumplir su misión.
La acción de las autoridades cubanas de arrestarla con sus acompañantes durante varias horas estuvo debidamente justificada. Sobre ella no se ejerció daño alguno y fue tratada con todo respeto, siendo interrogada en varias oportunidades para esclarecer sus pretensiones, motivos, así como otros detalles referentes a su “aventura” habanera. En coordinación con la embajada norteamericana en La Habana, estuvo detenida unas breves horas, trasladada a su hotel y, posteriormente, invitada a salir del país con destino a Carolina del Norte, que es su lugar de residencia.
Sus dos acompañantes cubanos en esta provocación fueron liberados horas después.
Aunque en la primeras horas tras su detención no se despertó un revuelo mediático en los medios de prensa y las redes sociales, siempre estuvo claro que el uso de la señora Motley, cuyo papel mediático es significativo, pretendía crear las condiciones para desarrollar un recrudecimiento en la guerra ideológica anticubana, en el marco del contexto de cambio de administración en EEUU y tras la derogación de la Posición Común por parte de la Unión Europea. Fue un claro intento de enrarecer el proceso de acercamiento diplomático entre Cuba y EEUU.
Como señalan varios medios, Kimberley Motley es una litigante internacional que actualmente trabaja en asuntos comerciales, criminales y de derechos humanos en Afganistán, Emiratos Árabes Unidos, Ghana, Uganda y Estados Unidos. Abogada internacional de derechos humanos, forma parte del equipo legal de HRF, por lo cual se ha vinculado desde 2016 con varios contrarrevolucionarios dentro de la actividad de HRF y el Oslo Freedon Fórum.
¿Quién es Kimberley Motley Chongyon?
Nacida en 1976, en Milwaukee, es fruto de una relación matrimonial entre un militar de origen afronorteamericano y una ciudadana de Corea del Norte, al igual que dos de sus hermanos y otra hermana. Se graduó en Artes y Ciencias (AAS) en el Milwaukee Area Technical College en 1997. Recibió una licenciatura de la Universidad de Wisconsin-Milwaukee en 2000, y en 2003 recibió una maestría de la misma institución. En el mismo año, obtuvo un doctorado en leyes en la Escuela de Derecho de la Universidad de Marquette. En 2003 comenzó a ejercer como abogada de oficio.
Motley fue coronada Miss Wisconsin en 2004.
Madre de tres hijos, ha tenido gran impacto mediático por ser la primera abogada no afgana autorizada para litigar en materia de jurisprudencia en Afganistán desde el 2008, después de trabajar como un defensor público en Milwaukee durante cinco años, como parte de un programa de educación legal de nueve meses a cargo de la Departamento de Estado de Estados Unidos para entrenar a abogados afganos. Asimismo, tiene el permiso para practicar en Afganistán, Wisconsin, ante el Tribunal Supremo de Estados Unidos, en tribunales financieros internacionales en Dubai y otros tribunales penales internacionales.
Desde 2009, Motley ha sido la directora ejecutiva de Motley Consulting International. Desde el mismo año también ha sido directora ejecutiva de Motley Legal Services, que brinda representación legal en Estados Unidos y Afganistán. Además de practicar el derecho, Motley enseñó clases de spinning en la base militar estadounidense mientras estuvo en Kabul.
En 2011 llevó el primer caso de violencia de género ante el Tribunal Supremo afgano.
En 2014, Motley fue nombrada por Richard Branson como una de las personas más inspiradoras y la describió como "un litigante inspirador con un mensaje poderoso"
Una película documental titulada Ley de Motley sobre Motley, realizado por la Danish Film Production Company, hecho en Copenhague y dirigida por Nicole Nielsen Horanyi y producida por Helle Faber, fue lanzado en octubre de 2015, obteniendo el Gran Premio del Jurado en NYC DOC 2015. También ganó el AWFJ - Alianza de Mujeres de Cine Premio AED Periodistas de documental dirigido por mujeres mejor en IDFA 2015. Así como nominado a otros premios.
Ella participó en el Oslo Freedom Forum (OFF) 2016, realizado entre el 23 y el 25 de mayo de este año, en que fungió como moderadora de uno de los paneles –el “Investing in Human Rights”– y donde pudo haber contactado a contrarrevolucionarios cubanos, como Rosa María Payá y el propio Danilo Maldonado. Con los mismos ha coincidido en otros eventos auspiciados por el OFF, la HRF y otros organismos promotores de la guerra mediática anticubana, como fueron los casos de:
San Francisco Freedom Forum, realizado el jueves, 29 de Septiembre de 2016, en la ciudad de San Francisco, donde coincidió con Rosa María Payá.
El College Freedom Forum (CFF) realizado en la Universidad Francisco Marroquín (UFM), en la Ciudad de Guatemala, Guatemala, el 4 de marzo de 2016, donde estuvo presente el mercenario Danilo "El Sexto" Maldonado, con el que mantiene una estrecha amistad.
Tiene planeado participar bajos los auspicios de la HRF en el CFF denominado Quórum Paseo San Francisco, a realizarse el venidero 19 de enero de 2017, con el apoyo de la Universidad San Francisco de Quito, en Ecuador. En esta oportunidad participará junto a la contrarrevolucionaria Rosa María Payá.
Impacto mediático de la noticia sobre su detención:
Hasta el momento varios medios contrarrevolucionarios o vinculados a la guerra mediática anticubana se han hecho eco de su detención en la Habana, tales como Ciber Cuba, Diario de Cuba, Martínoticias, Cuba News, 14ymedio, El Nuevo Herald, blogsdecuba.impela.net, entre otros. Se espera que a partir de hoy la noticia tenga un sobredimensionamiento en los medios y redes sociales, dado el peso mediático de esta persona.
Motley usa tres cuentas de Twitter:
@motleyslaw (la que mantiene inactiva y creada en 2015)
@chongyon (abierta por ella aunque no la ha usado hasta el momento)
Se ha empezado una campaña mediática a favor de la Motley en Twitter usando las etiquetas, aunque inicialmente ha tenido un enfoque informativo sobre su detención y posterior liberación y regreso a EEUU. Las principales etiquetas usadas han sido:
Los principales promotores de la campaña son: Human Rights Foundation (@HRF_es), Human Rights in Cuba (@FHRCuba) con sede en Miami; así como los contrarrevolucionarios Normando Hernández
(@NormandoHdez), #AbajoQuienTúSabes identificado como Lía Villares (@liavillares), Idolidia Arias (@idolidiadarias), Represores Cubanos (@represorescuba), 14ymedio(@14ymedio), hasta las 23 horas del 16 de dic de 2016.
http://carlosagaton.blogspot.com/2016/12/usa-kimberley-motley-una-figura-al.html
Confirmado plan para presionar a Trump a romper relaciones con Cuba / Arthur González / El Heraldo Cubano
No resignados a morder el polvo de la derrota, los miembros de la mafia terrorista anticubana radicada en Miami, intentaron preparar el escenario ideal para que Donald Trump, nuevo presidente de Estados Unidos, se viera obligado a romper nuevamente las relaciones con Cuba.
Para lograrlo, contaron con el apoyo de la extrema derecha del actual Gobierno que no acepta un nuevo camino para destruir a la Revolución cubana, como el seleccionado por Barack Obama, quien reconoció que casi 60 años de enfrentamiento, acciones de terrorismo de Estado, invasiones mercenarias y la guerra económica total, no dieron el más mínimo resultado, provocando el aislamiento continental de Washington.
El presente plan consistió en enviar a La Habana a la abogada Kimberley Motley, para la supuesta defensa de un elemento contrarrevolucionario al servicio de esa mafia anticubana, apoyada en su fama por haber ganado en el 2004 el concurso de belleza de Wisconsin.
Como licenciada en leyes la Sra. Motley sabe que no puede ejercer su profesión fuera de EE.UU. y menos participar en actos provocativos contra el orden público cubano con visado turístico, algo que en su país la llevaría directamente a la Corte de Justicia para ser juzgada, o a un centro de detención para inmigrantes.
La campaña de prensa a partir de su retención temporal y posterior reembarque hacia Estados Unidos, se basa en crear una matriz de opinión de que viajó como abogada del seudo artista, Danilo Maldonado, algo risible pues su título solo es reconocido en el país donde se formó el profesional.
Al no ser juzgada ni detenida por las autoridades cubanas, dada la vasta experiencia que tienen en ese tipo de provocaciones diseñadas en Miami, Kimberley Motley fue enviada rápidamente a su país, y la mafia terrorista volvió a tragarse el amargo sabor del descalabro, al no poder presentarle pruebas al futuro presidente Donald Trump, para que rompiera relaciones con La Habana por encarcelar a una “destacada” norteamericana.
La evidencia de que los mafiosos estaban detrás del diseño arcaico de tal provocación, fueron sus propias declaraciones en la rueda de prensa ejecutada de inmediato, el 18.12.2016 en Miami.
En la misma, Ileana Ros-Lehtinen y Mario Díaz-Balart, en compañía del ex congresista Lincoln Díaz-Balart, expresaron abiertamente:
“Esperamos que las concesiones unilaterales de la Casa Blanca al gobierno de Raúl Castro, lleguen a su fin cuando Donald Trump asuma el poder el 20 de enero próximo”.
Como parte de sus gastadas campañas mediáticas, repitieron nuevamente el “aumento de la represión y la violación de los derechos humanos en Cuba”, algo irreal y no observado por los tres millones de visitantes que anualmente arriban a la Isla para disfrutar de sus encantos y tranquilidad ciudadana.
Para no dejar dudas de que ellos financiaron el viaje de la abogada Motley para esa burda provocación, los tres congresistas aseguraron:
“Nos sentimos esperanzados de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, pondrá fin a las recientes concesiones unilaterales del presidente Barack Obama, al Gobierno cubano”.
Para intentar presentar a Obama como “cómplice” de Cuba, Ros-Lehtinen, hija de uno de los testaferros del dictador Fulgencio Batista, dio cifras de arrestos que, de ser ciertos, hubiera que haberle solicitado al Gobierno yanqui un espacio en la cárcel que posee en la ilegal Base Naval en la provincia cubana de Guantánamo, pues no cabrían en las de Cuba.
Defraudados de no poder destruir a la Revolución en 60 años de actos terroristas y ni siquiera mermar el amplio apoyo popular ratificado durante el sepelio del líder Fidel Castro, los hermanos Díaz-Balart, hijos del quien fuera ministro del interior del sanguinario régimen batistiano, se sumaron los desvaríos de Ileana Ros, repitiendo el estribillo de que:
“Tras dos años de concesiones sin fin, la actual política hacia Cuba ha servido solamente para empeorar la situación en que viven 11 millones de cubanos, pero eso va a cambiar muy pronto, porque el presidente Donald Trump, ha dicho múltiples veces, antes y después de las elecciones, que va a cambiar la política y exigirle concesiones a Castro”.
Finalmente se lamentaron de “la asistencia otorgada por Obama al régimen de Castro, con el propósito de tratar de ayudar a ese régimen”.
Para los que no conocen aun la política estadounidense hacia Cuba y se han creído que Obama ha tomado el camino correcto, deben analizar lo asegurado por Lincoln Díaz-Balart, cuando afirmó con todo su odio hacia el pueblo cubano:
“Tenemos que estar felices entre muchas cosas porque Obama fracasó el intentar por todos los medios consolidar a la tiranía de los Castro, porque la ley sigue en pie (Ley Helms-Burton), y exige tres condiciones para que se pueda ayudar económicamente a cualquier gobierno cubano, la liberación de todos los presos políticos sin excepciones; la legalización de todos los partidos políticos, de los sindicatos obreros y de la prensa independiente; y la convocatoria de elecciones partidistas”.
De ahí que los pasos de Obama nunca han sido hacia la eliminación de la guerra económica, las acciones subversivas, cortar el financiamiento a la contrarrevolución, cerrar Radio y TV Martí y menos aún devolver el pedazo de tierra en Guantánamo que ocupa la base naval.
Este plan con el empleo de la abogada, no fructificó, pero habrá muchos más en los próximos meses para presionar a Trump a retrotraer la política hacia el punto antes del 14.12.2014.
Los asesores del nuevo Presidente tendrán la responsabilidad histórica de aceptar el reto de mantener el cambio de política para alcanzar el mismo fin, o retroceder a la gastada política de enfrentamiento, pero siempre deberán recordar el legado de José Martí cuando afirmó:
“Con la resolución indudable del pueblo de Cuba, es imposible la derrota”.
https://aucaencayohueso.wordpress.com/2016/12/21/confirmado-plan-para-presionar-a-trump-a-romper-relaciones-con-cuba/
Publicado por: David Díaz Ríos / CubaSigueLaMarcha.blogspot.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario