La importancia de los valores
Por Arthur González/El Heraldo Cubano.- Al parecer la imposición de sus valores es lo que Barack Obama pretende instrumentar con su nueva táctica para destruir desde adentro a la Revolución cubana, pues en cada discurso en los que trata el tema de Cuba lo expone con claridad.
Tradicionalmente los Estados Unidos se sienten los campeones del mundo y creen firmemente que sus valores son los mejores y deben imponérselos al resto del mundo para dominar la mente de los ciudadanos, de ahí la importancia de que los cubanos y cubanas estén bien alertas para no dejar que los suyos sean sustituidos por los yanquis.
En su histórico discurso del 17/12/2014 Obama expresó:
“[…] podemos hacer más para apoyar al pueblo cubano y promover nuestros valores a través del compromiso”.
“Los cubanos-americanos…son los mejores embajadores potenciales de nuestros valores”.
“Nadie representa mejor los valores de Estados Unidos que el pueblo estadounidense, creo que este contacto… es lo que más contribuye a otorgarle autoridad al pueblo cubano”.
El 01/07/2015 al anunciar la apertura de las embajadas aseguró:
“Estados Unidos no dudará en protestar cuando vea que en Cuba se actúa de forma contradictoria con sus valores y sobre sus conceptos de libertad de expresión, asociación y el acceso a la información”.
En la estrategia de inteligencia de la CIA contra la URSS, su director el señor Allen Dulles escribió:
“Sembrando el caos en la Unión Soviética sustituiremos sus valores, sin que sea percibido, por otros falsos y les obligaremos a creer en ellos”.
“De la literatura y el arte, por ejemplo, haremos desaparecer su carga social. Deshabituaremos a los artistas, les quitaremos las ganas de dedicarse al arte, a la investigación de los procesos que se desarrollan en el interior de la sociedad”.
“Los Estados Unidos deben imponerle su visión, estilo de vida e intereses particulares al resto del mundo…”
Con propósitos similares la precandidata presidencial Hillary Clinton expuso el 31/07/2015 en Miami:
“Sin intención de hacerlo, estábamos ayudando al régimen cubano para que mantuviera a Cuba como una sociedad cerrada y controlada, en vez de promover la apertura positiva a la influencia externa, en la misma forma que lo hicimos de forma tan efectiva con el antiguo bloque Soviético y en otros lugares”.
Samantha Power embajadora estadounidense ante las Naciones Unidas, visitó el 31/07/2015 a la misión de Cuba en la ONU y posteriormente afirmó:
“El deshielo permite defender los valores de EE.UU. en la Isla, incluyendo los derechos humanos y la dignidad humana”.
No hay dudas de las intenciones que pretende lograr la Casa Blanca con sus relaciones diplomáticas con Cuba, por eso es tan importante que los cubanos mantengan en alto sus valores patrióticos, la cultura nacional, sus bailes, literatura, su bandera y el himno, como iconos intocables del país para que no sean sustituidos sutilmente por los del Norte.
En Cuba no hacen falta McDonald para deslumbrar a los jóvenes como sucedió en Moscú, deben prevalecer el mojito, la ropa vieja, el picadillo y las masas de cerdo, el arroz con frijoles negros, los plátanos fritos y la sabrosa ensalada de aguacate, acompañados con una cerveza bien fría, escuchando un buen Cha Cha Chá, o un bolero, mientras se recrean la vista con el malecón habanero y el Morro de telón de fondo, donde ondea libre la bandera cubana.
Porque como dijera José Martí:
“…la madre del decoro, la savia de la libertad y el mantenimiento de la República…es sobre todo lo demás, la propagación de la cultura”.
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