Entre las decenas de personas sin hogar que viven en el
Stranahan Park en el centro de Fort Lauderdale se encuentra la
octogenaria Fermina Lázara Carmela de las Mercedes Batista Estévez, hija
del ex dictador cubano Fulgencio Batista, derrocado por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz en 1959.(1)
Un reportaje del canal 10 de la TV de Fort Lauderdale, descubrió a Carmela que cumplirá 82 años en julio próximo, junto a su hija adoptiva Ana, un gato y sus maletas y bolsas en el nuevo “hogar” a la intemperie. Lleva consigo entre sus pertenencias además, un libro de fotos que incluye una junto a su padre que en la parte de atrás dice: “besos”.
Carmela ha quedado en la calle tras perder con el tiempo la millonaria herencia y propiedades que heredó de Batista, gracias a que este huyó de Cuba con una fortuna que robó al pueblo.
Fulgencio Batista tuvo nueve hijos, ocho en sus dos matrimonios.Tres en el primero de ellos con Elisa Godínez (1900-1993): Mirtha Caridad (1927-2010), Elisa Aleida (1933) y Fulgencio Rubén Batista (1933-2007). Con Marta Fernández Miranda (1923-2006) nacieron otros cinco: Jorge Luis (1942), Roberto Francisco (1947), Carlos Manuel (1950-1969), José Fulgencio (1953) y Marta María (1957).
Carmela nació en 1935 del romance extramatrimonial de Batista con su madre Marina Estévez.
Un reportaje del canal 10 de la TV de Fort Lauderdale, descubrió a Carmela que cumplirá 82 años en julio próximo, junto a su hija adoptiva Ana, un gato y sus maletas y bolsas en el nuevo “hogar” a la intemperie. Lleva consigo entre sus pertenencias además, un libro de fotos que incluye una junto a su padre que en la parte de atrás dice: “besos”.
Carmela ha quedado en la calle tras perder con el tiempo la millonaria herencia y propiedades que heredó de Batista, gracias a que este huyó de Cuba con una fortuna que robó al pueblo.
Fulgencio Batista tuvo nueve hijos, ocho en sus dos matrimonios.Tres en el primero de ellos con Elisa Godínez (1900-1993): Mirtha Caridad (1927-2010), Elisa Aleida (1933) y Fulgencio Rubén Batista (1933-2007). Con Marta Fernández Miranda (1923-2006) nacieron otros cinco: Jorge Luis (1942), Roberto Francisco (1947), Carlos Manuel (1950-1969), José Fulgencio (1953) y Marta María (1957).
Carmela nació en 1935 del romance extramatrimonial de Batista con su madre Marina Estévez.
En un arqueo a las llamadas “bóvedas de Batista”, llevado a cabo por
el Ministerio de Recuperación de Bienes Malversados creado por Fidel en
enero de 1959, se ocupó un testamento ológrafo del ex dictador en que se
nombran entre los beneficiarios directos, en caso de su fallecimiento, a
sus hijos Fulgencio, Rubén y Jorge Luis, y a su hija extramatrimonial,
Carmela, que en ese entonces tenía 23 años.
“Es una larga historia. Siempre he dicho que tengo una vida perfecta. Es por eso que estar aquí, ahora, es como un shock “respondió al ser entrevistada en el parque donde duerme cada noche.
Luego que Fulgencio Batista abandonó Cuba abruptamente en la madrugada del 1 de enero de 1959 junto a su familia y varias decenas de millones de dólares, voló a un hotel en Nueva York con un tío y un sobrino.
Carmela cuenta que cuando su padre le preguntó dónde ella quería vivir, le dijo que en Fort Lauderdale. Sin preocupaciones financieras debido a lo que su padre se llevó de la Isla, se dedicó a dar clases de piano y a ejercer como secretaria en una oficina médica.
Cuando el otrora dictador murió en 1973, todos sus hijos fueron convocados a NuevaYork para la lectura del testamento y Carmela confirmó que a ella le tocó más de un millón de dólares de ilegal fortuna, sin revelar el monto exacto.
Compró una casa en el exclusivo barrio de Coral Ridge y un apartamento en Galt Ocean Mile y tuvo un breve matrimonio y a los 53 años adoptó a Ana recién nacida, a la que luego enviaría a las mejores escuelas privadas.
La casa que Carmela compró con la herencia que le dejó Batista.
“Perdí mi dinero con el mercado de valores y tal vez tenía demasiado mano abierta,” dijo Carmela.
Acumuló 17 mil dólares en gastos de tarjetas de créditos que no pagó a pesar de hipotecar la casa y fue llevada a juicio. Igual le sucedió con la factura del agua. En una ejecución hipotecaria perdió su casa que fue vendida el pasado año en 830 mil dólares.
Por dos años Carmela, su hija y el gato, han estado sin hogar viviendo en vehículos sin uso, ocasionalmente en moteles cuando tienen algún dinero y por meses en los bancos de las paradas de ómnibus a lo largo de Oakland Park Boulevard, antes de instalarse en Stranahan Park.
Ahora duermen ante la puerta techada de la Biblioteca del Condado de Broward. “A veces lloro, es difícil. Es muy duro”, cuenta.
Ana dijo que le han prometido un trabajo en Orlando, que Carmela llama “el lugar de Mickey Mouse”, a partir del 8 de julio, pero no tienen dinero para llegar hasta allí.
“Es como si Dios me quiere enseñar algo,” dijo Carmela. “La próxima vez no va a suceder. Es una lección dura, pero se aprende” opinó la hija del dictador Fulgencia Batista al canal 10 de Fort Lauderdale.
Hija adoptiva Ana y el gato
(Tomado de https://www.helloforos.com/t/hija-de-fulgencio-batista-es-una-homeless-en-la-florida/279870)
“Es una larga historia. Siempre he dicho que tengo una vida perfecta. Es por eso que estar aquí, ahora, es como un shock “respondió al ser entrevistada en el parque donde duerme cada noche.
Luego que Fulgencio Batista abandonó Cuba abruptamente en la madrugada del 1 de enero de 1959 junto a su familia y varias decenas de millones de dólares, voló a un hotel en Nueva York con un tío y un sobrino.
Carmela cuenta que cuando su padre le preguntó dónde ella quería vivir, le dijo que en Fort Lauderdale. Sin preocupaciones financieras debido a lo que su padre se llevó de la Isla, se dedicó a dar clases de piano y a ejercer como secretaria en una oficina médica.
Cuando el otrora dictador murió en 1973, todos sus hijos fueron convocados a NuevaYork para la lectura del testamento y Carmela confirmó que a ella le tocó más de un millón de dólares de ilegal fortuna, sin revelar el monto exacto.
Compró una casa en el exclusivo barrio de Coral Ridge y un apartamento en Galt Ocean Mile y tuvo un breve matrimonio y a los 53 años adoptó a Ana recién nacida, a la que luego enviaría a las mejores escuelas privadas.
La casa que Carmela compró con la herencia que le dejó Batista.
“Perdí mi dinero con el mercado de valores y tal vez tenía demasiado mano abierta,” dijo Carmela.
Acumuló 17 mil dólares en gastos de tarjetas de créditos que no pagó a pesar de hipotecar la casa y fue llevada a juicio. Igual le sucedió con la factura del agua. En una ejecución hipotecaria perdió su casa que fue vendida el pasado año en 830 mil dólares.
Por dos años Carmela, su hija y el gato, han estado sin hogar viviendo en vehículos sin uso, ocasionalmente en moteles cuando tienen algún dinero y por meses en los bancos de las paradas de ómnibus a lo largo de Oakland Park Boulevard, antes de instalarse en Stranahan Park.
Ahora duermen ante la puerta techada de la Biblioteca del Condado de Broward. “A veces lloro, es difícil. Es muy duro”, cuenta.
Ana dijo que le han prometido un trabajo en Orlando, que Carmela llama “el lugar de Mickey Mouse”, a partir del 8 de julio, pero no tienen dinero para llegar hasta allí.
“Es como si Dios me quiere enseñar algo,” dijo Carmela. “La próxima vez no va a suceder. Es una lección dura, pero se aprende” opinó la hija del dictador Fulgencia Batista al canal 10 de Fort Lauderdale.
Hija adoptiva Ana y el gato
Nota de la Redacción:
(1) Fulgencio Batista fue gobernante de facto. Dirigió un Golpe Militar el 10 de marzo de 1952 y se erigió en dictador durante siete años. En ese periodo se cometieron miles de crímenes en Cuba y el país fue entregado al capital y la mafia estadounidense. Huyó de la Isla en la madrugada del 1 de enero de 1959 ante el inevitable triunfo de la Revolución encabezada por Fidel Castro Ruz.
(Tomado de https://www.helloforos.com/t/hija-de-fulgencio-batista-es-una-homeless-en-la-florida/279870)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario